Los productos y los medios de producción ecológicos, así como los ingredientes orgánicos contenidos en productos de venta al por menor, son producidos sin el uso de fertilizantes ni de plaguicidas sintéticos, sin aguas residuales, sin organismos genéticamente modificados ni utilizando radiación ionizante. Los animales destinados a producir carne, huevo y productos lácteos no reciben antibióticos ni hormonas de crecimiento.
Los sistemas de producción orgánica se manejan de forma que corresponden a las condiciones específicas del lugar, integrando las prácticas culturales, mecánicas y biológicas que adoptan la ciclicidad de los recursos, que promueven el equilibrio ecológico y que conservan la biodiversidad.
También deben certificarse aquellas compañías que manipulan o procesan alimentos orgánicos antes de que lleguen a los anaqueles de las tiendas de comestibles o a las cocinas de los restaurantes. Las personas que manipulan alimentos orgánicos son las que cocinan, hornean, mezclan, extraen, congelan, empacan, procesan o modifican de alguna manera las materias primas orgánicas desde crudo. Estos manipuladores de alimentos protegen los alimentos del contacto con sustancias prohibidas y evitan que se combinen o se mezclen con productos que no son orgánicos.
Se ha verificado que los productos alimenticios que se encuentran certificados orgánicamente por QAI cumplan de forma estricta normas y estándares bien definidos que han sido establecidos por los organismos nacionales e internacionales que los emiten, como el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos,USDA, y por otras agencias independientes.